Hechos violentos y abuso de la fuerza ha protagonizado el Esmad para despejar las vías que campesinos e indígenas pacíficamente se han tomado para exigir un diálogo por los acuerdos incumplidos.
En los 4 días de Minga de la Cumbre Nacional Agraria, la fuerte represión ha causado el asesinato de dos indígenas en el Cauca y un indígena en el Valle. Así mismo se registran más de 200 heridos y varios detenidos. Se trata de Gersain Cerón del Resguardo ancestral de las Mercedes y Marcos Aurelio del Resguardo la Aguada territorio de Sath Tama Kiwe de Caldono, asesinados por el Esmad.
Tan solo en Huila, la represión se prolongó por más de cuatro horas en el puente El Pescador en la vía a Hobo. Según información de ONIC, 35 fueron los heridos por el operativo militar. Sin embargo, en Comunicado de la organización indígena del Huila, Crihu se manifestó que el balance del uso excesivo de la fuerza por parte de la fuerza pública dejó como resultado 87 personas heridas con distinta gravedad, “en este momento 6 pobladores originarios se encuentran internados en las redes hospitalarias del municipio de Hobo y Neiva. Las lesiones más graves implicaron trauma cerrado de tórax, pérdida de parte de las extremidades superiores y lesiones graves en la movilidad de los afectados”.
En la zona a situación retornó a la calma con el compromiso de una mesa con el Ministro de Agricultura, Aurelio Irragori Valencia , delegados de la Gobernación Departamental y los delegados del Consejo Regional Indígena del Huila. “El Movimiento Indígena del Huila deja clara la intención de minga de manera indefinida hasta tanto no se llegue a soluciones efectivas a las necesidades de los pueblos”, puntualiza la organización indígena.
Mientras tanto, en el punto de Bruselas en la vía que de Pitalito comunica con Putumayo, se reportó la captura por parte de la fuerza pública de tres campesinos y cinco menores aprehendidos que se encontraban en la movilización. Se trata de José Ever Perdomo Gumanaga, William David Rodríguez y Andrés Guaca Noguera; judicializados por los delitos de asonada y violencia contra servidor Público. Una muestra de la persecución a la protesta social.
Para la defensora de derechos, Piedad Córdoba se justifica la movilización popular de los campesinos, ya que como garante efectivamente no se ha cumplido los compromisos acordados, “El gobierno se equivoca en reprimir y dar el trato de delincuentes como ha sucedido con la minga”.
Foto/ Colectivo Vientos de Comunicación