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Categoría: Procesos
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2013-09-02El Gobierno Nacional ha querido dividir los sectores agrarios para negociar de manera individual y desarticular la acción nacional de movilización. Así lo ha hecho con las movilizaciones de Cundinamarca, Boyacá y Nariño. En estas zonas las protestas fueron fuertes y contundentes generando una crisis alimentaria al interior del país, por eso la urgencia de llegar a acuerdos para desbloquear las vías. Luego poder concentrar todas las acciones de represión en el sur y suroccidente del país que se encuentra paralizado. De igual forma la agitación del paro nacional ha hecho que múltiples sectores se movilicen para exigir sus propias reivindicaciones como es el caso de los transportadores, la salud y profesores. Es que en la últimas horas La Asociación Colombiana de Camioneros, ACC anunció el paro es total del sector en todo el país, ya que el Gobierno no quiere cambiar su decisión de reducir el precio de los combustibles diciendo que es un asunto inamovible.

 

La estrategia por parte del Estado de infiltrar las movilizaciones, generar zozobra y caos; incitando al vandalismo para criminalizar la movilización que ya tiene más de 500 judicializados, este saboteo al Paro es el complemento a las acusaciones de las relaciones con la Farc con supuestos panfletos y la estigmatización a las organizaciones sociales, sigue siendo la constate. A esto se suma el señalamiento, empadronamiento y hostigamiento a los líderes y organizaciones acompañantes la protesta.

El Gobierno está llegando a acuerdos parciales con sectores y zonas, quiere dar la sensación de que el paro se está arreglando y con esto crear divisiones que terminen desarticulando la movilización. Estos diálogos son bajo la presión de desbloquear las vías como pasó en Boyacá y Nariño. Pero esto busca dividir y desconocer el paro nacional en zonas como Caquetá y Magdalena Medio, rechazando la legitimidad y solidad nacional que ha despertado el paro en todo el territorio nacional. En la mesa que se establece en cada sector no se encuentra representado los participantes y convocantes del paro nacional, como sucede en Nariño sólo se sentó con indígenas; dejando a campesinos del norte de Nariño por fuera. Es por eso que todavía continúan la movilización, a pesar que el Gobierno con la  ayuda de los medios quiera disfrazar la realidad, diciendo que se llegaron a acuerdos y el paro se levantó.

Voceros de la movilización sostienen  que el paro continúa.

La situación en el Huila es aguda, hay más de 11 bloqueos permanentes y otros 5 alternos que paralizan al departamento. Zonas como Garzón, Gigante y Pitalito se encuentran sin posibilidad de movilización,  lo que ya afecta el abastecimiento alimentario, gas y gasolina. Los bloqueos con varios carros sobre la vía y algunos incinerados están desde Campoalegre a Hobo, en la zona de Algeciras y de ahí hasta el sur y occidente hay constantes bloqueos. Otros bloqueos parciales se ha presentado en vías cercana a Neiva cómo Yaguará, Palermo y el Cagúan.

El Florencia capital del Caquetá y Putumayo la situación es similar. En la capital del Caquetá se encuentra bloqueada en sus tres entradas desde hace varios días. Lo que ha producido una emergencia sanitaria al no poder recogerse la basura. El sector de transportadores  urbanos aprovechó para entrar en paro y los comerciantes anuncian que cerrarán sus locales. Lo que evidencia una parálisis total de Florencia. En el Putumayo la movilidad está bloqueada y paralizada la producción petrolera.

Son  10 departamento  en los  que el paro con bloqueos y concentración de campesinos se mantiene. En el Cauca indígenas concentrados en la María marcharán de manera masiva hasta Popayán. En Mojarras Cauca se ha vivido una fuerte represión en la que se ha denunciado los disparos del Ejército contra el campesinado, luego de la orden de militarizar todo el país para evitar bloqueos.

Tolima hay bloqueos en la vía que conduce al Alto de la Línea y Castilla. Pero en Meta y Arauca también hay miles de campesinos concentrados que el Gobierno parece desconocer. En Magdalena Medio hay manifestaciones de campesinos del Bolívar  y más de mil campesinos se concentran en Barbosa, Antioquia.

Olla a presión

Mientras esta crisis social estalla en país como una olla a presión, se conoce los alcances del  Ica que a raíz de garantizar los TLC con la importación de productos y la privatización de las semillas, expidió una norma 9.70 con la que se declara ilegal cultivar con semillas propias, por lo que ha quemado miles de toneladas de arroz y criminalizado a los campesinos. Pero esto era sólo la tapa, denuncia de Noticias Uno afirma: "Además de los 60 mil kilos de semilla de arroz que el ICA destruye en el documental 9-70, que sus directivos pretenden rectificar, la entidad oficial ordenó quemar 12 toneladas de semillas de algodón, 6 de sorgo y 4 de maíz, con base en una norma diferente a la aludida en el video. Después del comunicado en el que dicen no haber destruido más semillas, la gerente del ICA dejó su cargo y no hay quien responda por el caos que reina en el mercado de las semillas." Fuera de esto mientras el país se moviliza contra los TLC, el Gobierno Nacional adelanta otro tratado comercial con China, que además desarrollará proyectos hidroeléctricos en el río Magdalena.

Las organizaciones del paro CUT, CNA, y MIA  han convocado a un cacerolazo nacional este 4 de septiembre de apoyo a los paros nacionales agrario, salud, educación y camioneros. Esto para demandar del Gobierno Nacional la apertura de negociación y soluciones a los pliegos agrario, salud, educación y camionero.